Diez años de DONESenART.

Mayo 2015
Por Yolanda Dorado

Antonia Bueno, dramaturga, directora, actriz, investigadora teatral y Presidenta de la Asociación DONESenART.

En primer lugar Enhorabuena por el aniversario de vuestra asociación DONESenART.
Muchas gracias, Yolanda.

YOLANDA DORADO: Lo primero que me gustaría preguntarte es ¿Qué valoración harías de estos 10 años? ¿En qué crees que habéis avanzado respecto al objetivo que os planteasteis en su fundación?

ANTONIA BUENO: Una asociación es un organismo vivo, que atraviesa fases de mayor esplendor y otras más apagadas. Este décimo aniversario es un momento hermoso, porque hemos crecido en número de asociadas y es mayor la involucración en los trabajos asociativos.
Echando la vista atrás, veo que a lo largo de estos diez años hemos ido cumpliendo las metas propuestas, que son fundamentalmente dos: servir de plataforma para visibilizar a las mujeres creadoras actuales, y recuperar la memoria de esas grandes mujeres minusvaloradas por la época que les tocó vivir, y oscurecidas a menudo a la sombra de su maridos o de figuras masculinas, también creadores. Estas dos son las líneas motoras que han conducido la navegación en nuestra nave asociativa.
Las acciones que hemos llevado a cabo han sido múltiples y variadas:
Periódicamente hemos ido haciendo Encuentros de Mujeres Creadoras. Colaboramos con otras asociaciones en sus eventos. Participamos en la vida sociocultural valenciana.
Y todos los años realizamos nuestro Festival Octubre DONESenART.
Nuestros Festivales siempre han sido multidisciplinares, ya que nuestra asociación engloba mujeres creadoras en sus distintas facetas: teatro, cine, pintura, escritura, música, danza… Los tres primeros Festivales, del 2005 al 2007, fueron muestras variadas. A partir del IV Festival han sido temáticos, sin perder su carácter multidisciplinar.
En 2008 fue la Mujer y la Pintura, con Manuela Ballester y otras creadoras olvidadas.

En 2009 la Mujer y el Teatro, con un Ciclo de dramaturgas republicanas.

En 2010 la Mujer y la Inmigración.

En 2011 la Mujer y el Cine, con nuestro I Festival Dona i Cinema.

En 2012 la Mujer y las Fronteras, con Transfronterizas.

En 2013 la Mujer y la Crisis con Descolocadas.

En 2014 la Mujer y la Música con Sohnadas.

Y este año 2015 celebraremos nuestro X Aniversario con un Festival especial, en el que queremos involucrar a creadoras de toda la península. Lo llamaremos Ibéricas.

Y.D.: Las asociaciones de Mujeres que se centran en las Artes Escénicas como DONESenART en Valencia, Marías Guerreras en Madrid o Proyecte Vaca en Barcelona, estáis cumpliendo una labor que ni el estado ni ninguna autonomía española asume. ¿En qué momento os encontráis como Asociación? ¿Tenéis apoyos de la Comunidad Valenciana para desarrollar vuestros proyectos?

A.B.: Los primeros años tuvimos apoyo económico de la Comunidad Valenciana, a través de la Consellería de Bienestar Social, de la Dirección General de la Mujer y del IVAC (Instituto Valenciano de Audiovisual y Cine). También tuvimos apoyo económico del ayuntamiento de Burjassot, donde se encuentra la sede de DONESenART. Y conseguimos ayuda de la CAM para un documental, antes de que la entidad financiera se hundiera. Luego eso se acabó, supuestamente por la crisis y los recortes.
Los apoyos logísticos han sido variados: La Universitat de Valencia, la Fundación L’iber, el Museo de BBAA San Pío V, el Club Diario Levante, Bancaixa, CIMA, vinos Murviedo, diversas asociaciones de mujeres: africanas, búlgaras, mexicanas…
Quiero resaltar el apoyo fundamental de SGAE Valencia desde el primer momento, tanto financiera como logísticamente, dotándonos de ayudas económicas para realizar nuestros Festivales anuales de Octubre DONES, y poniendo a nuestra disposición el salón de actos para nuestras actividades, así como salas para reuniones. SGAE Valencia es nuestra casa y sus trabajadores un encanto del primero al último. Ojalá la imagen de SGAE a nivel de toda España fuera la que tenemos nosotras aquí.

Y.D.: El 15 de Abril habéis celebrado en IV Encuentro de Mujeres Creadoras, en el mes de Octubre celebráis todos los años el Festival Dones… Cuéntanos cómo funciona la Asociación, cómo trabajáis, de donde surgen vuestras ideas, etc.

A.B.: A nivel burocrático, la asociación cuenta con una Junta directiva, en la que estamos una presidenta, una secretaria, una tesorera y cuatro vocales. Y hay reuniones periódicas donde nos reunimos en asamblea todas las asociadas, para valorar lo que se va realizando y lanzar nuestras propuestas.
A nivel práctico funcionamos a través de grupos de trabajo, que se encargan de proponer todo tipo de actividades y llevarlas a cabo.
Para nosotras es muy importante el trabajo en red con otras asociaciones de Mujeres. Formamos parte activa de la xarxa (red) de mujeres del ayuntamiento de Burjassot, en el marco de ESPAI DONA (Espacio Mujer). Y también formamos parte de la federación de asociaciones de mujeres de los municipios de L´Horta Nord (La Huerta Norte).
Para ampliar las redes de comunicación hemos creado Amigues i Amics de DONESenART, una sección que nos conecta directamente con nuestro entorno valenciano y de la que pueden formar parte todas/os aquellas/os que, aun no siendo mujeres o no perteneciendo a las Artes Escénicas, nos apoyan y quieren participar de nuestro proyecto.

Y.D.: Como dramaturga, directora, actriz e investigadora teatral conoces muy bien el terreno en el que nos movemos las mujeres creadoras, me refiero a la lucha por la visibilidad y la igualdad en nuestra profesión. ¿Has notado avances significativos en los últimos tiempos? ¿Crees que existe un cambio real en la sociedad a favor de la igualdad en el ámbito de la cultura?

A.B.: Sí, he notado avances. Las creadoras escénicas hemos ido ganando un terreno que nos pertenece por derecho. Pero aún queda camino por recorrer. Una cosa es ser actriz (objeto de la mirada) y otra ser dramaturga, directora o productora (creadora de la mirada). Siempre cuento la anécdota de que como actriz nunca ha habido confusión respecto a mi nombre; pero (¡Oh, casualidad!) más de una vez me han llamado “Antonio” Bueno (¿Tal vez por la semejanza con Buero?) cuando mi rol era de dramaturga, directora o productora. Creo que los lapsus linguae encierran tropiezos no sólo de la mente sino también del cerebro.
Por eso aún son precisas asociaciones como DONESenART, para restaurar estos “tropiezos” y actuar como lámparas que alumbren nuestra invisibilidad. No me gusta hablar de “lucha”, porque los creadores escénicos no son nuestros enemigos, sino nuestros aliados en la construcción de un teatro plural y más rico para todos y todas.

Y.D.: ¿En qué nivel de importancia crees que está ahora mismo la cultura en España? ¿Y el teatro?

A.B.: La Cultura estaría bajo mínimos o aniquilada del todo si fuera por las Instituciones Políticas. Es el esfuerzo titánico de los teatreros y demás creadores lo que mantiene viva la Cultura en nuestro país. De hecho, somos nosotros, a base de cobrar poco y tarde, quienes realmente posibilitamos las programaciones culturales de ayuntamientos, diputaciones, gobiernos autonómicos y estatales, que luego en los papeles alardean de llevar a cabo como iniciativa suya.
El teatro es considerado como una actividad “de lujo” (véanse los impuestos), y por ello prescindible, (notablemente más prescindible que la pornografía). Con la excusa de dedicar partidas culturales a necesidades sociales, se han suprimido ayudas, concertaciones, se han enflaquecido programaciones y premios… Por desgracia y con gran indignación, vamos descubriendo que en muchos casos esas partidas han sido utilizadas para otros fines, y no precisamente sociales.
Espero y deseo vivamente que esto cambie lo antes posible, por el bien de nuestro país.

Y.D.: Si nos centramos en tu labor como Dramaturga, ¿Estás viendo un cambio de tendencia? ¿Hemos pasado de “no hay autores” a “viva el autor”?

A.B.: Aunque aún no nos vitorean por la calle (je, je…), sí creo que estamos en un cambio de tendencia. Nuestros compatriotas se van desprendiendo, poco a poco, de ese tópico latiguillo: “Ahora no hay autores interesantes.” A quienes les está costando más que al público es a los productores teatrales, que siguen buscando el éxito a través de autores de fuera de nuestras fronteras, o de autores españoles muertos.
En ese cambio hacia una mayor credibilidad en nosotros, los autores que estamos vivitos y coleando, han ayudado mucho organismos como nuestra asociación, propiciando nuestra visibilidad a través de acciones como los Maratones de Monólogos, los Salones del Libro Teatral, los Premios; así como, por supuesto, con las ediciones de textos.
También ha sido de gran importancia para nuestra visibilización el nuevo rumbo del Centro Dramático Nacional y de algún otro Centro Dramático Autonómico.

Y.D.: Cuando te enfrentas a un nuevo texto, a un nuevo proyecto de escritura… ¿Cuál es para ti el mejor momento de la creación?

A.B.: El momento en que los personajes te hablan.
Has pasado un tiempo merodeando al su alrededor, intentando visualizarlos, conocerlos, acercarte a su biografía, saber de sus conflictos consigo mismos y con los otros… Y un día, de repente, te miran a los ojos y te hablan. Si escuchas con atención, te sorprendes con sus revelaciones, a menudo muy diferentes a las que tú suponías, y siempre más interesantes; esas verdades profundas que encierra el alma del personaje y que se vislumbran sólo en un momento que podríamos llamar “estado de gracia”. Ese momento es de una intensidad tal que roza la magia del chamán. Ahí brotan emociones y palabras que no pertenecen a mi devenir cotidiano. Tengo la sensación de convertirme en un canal, en una demiurga que escribe lo que ellos, con rabia o ternura, expresan. Intento dejarme permear por ellos, que sean realmente ellos quienes hablen, quienes “se cuenten”.

Y.D.: Con más de diez obras teatrales publicadas, ¿Cuál es tu tema? ¿El tema que subyace debajo de la piel de todas tus obras?

A.B.: Mi tema fundamental es la Mujer. Muchas de mis obras tienen como eje central mujeres que buscan ser las necesarias protagonistas de sus historias. El desarrollo de la acción conduce a estas mujeres a través de peripecias en las que se enfrentan a la incomprensión del mundo que les rodea, a las dificultades de su entorno y también, por supuesto, a su propios conflictos y contradicciones internas.
Tal vez porque no he podido ser madre, cosa que habría deseado, un planteamiento que me gusta y que aparece de manera recurrente en mis obras es la cadena de madres a hijas a lo largo de generaciones, ese dulce enlace que va dejando un rastro casi imperceptible pero de gran calado.
Una figura muy querida por mí es la “vieja sabia”, la abuela que transmite la sabiduría de esa cadena de mujeres a las nuevas generaciones.
La vida y la muerte es un binomio que permea gran parte de mis textos. Mis personajes, incluso cuando no son humanos, ya que en muchas de mis obras breves son objetos, viven y mueren intensamente.

Y.D.: ¿Qué consejo le darías a una dramaturga novel?

A.B.: Que lea y vea mucho teatro. Y novela, cine, poesía, música…
Y junto a eso, que viva con intensidad, que no se encierre en su móvil o en su tablet, que mire a su alrededor para dejarse impregnar por la realidad de su entorno y encontrar móviles (me refiero a motores creativos) que la impulsen a crear una pieza teatral.
Bagaje técnico y pasión por la realidad.
Y en el caso de una mujer, que aproveche ese camino que venimos trazando generaciones de autoras, en busca de nuestro merecido protagonismo.

Y.D.: Desde la AAT intentamos apoyar y ayudar al autor en todas sus facetas… Creación, Publicación, difusión… pero todavía queda mucho por hacer. ¿Qué sería importante para ti y crees que no se está haciendo?

A.B.: Desde que vivo en Valencia, advierto una centralización en Madrid de las actividades de la asociación. Echo en falta una descentralización. Ya sé que no es fácil, dado que la mayor parte de asociados vive en Madrid. Pero, creo que podrían estudiarse vías descentralizadoras.
Lo que está ocurriendo es que están naciendo asociaciones autonómicas de autores, como ocurre en la Comunidad Valenciana, donde se ha creado la AVEET (Asociació Valenciana de Escriptores i Escriptors), a cuya junta directiva pertenezco. Con ello intento: por un lado participar activamente en el movimiento de esta Comunidad, y por otro tender puentes entre la AAT y la AVEET, para que no restemos sino que sumemos esfuerzos en la visibilización autoral.

Y.D.: ¿Cuáles son tus próximos proyectos teatrales? ¿Cuál es tu próximo sueño?

A.B.: Este año estoy impartiendo una serie de talleres y cursos teatrales. En uno de ellos, dirigido a mujeres, trabajamos la autoestima a través de las herramientas teatrales. Está siendo muy fructífero y están surgiendo sugestivos monólogos, de los que haremos una muestra en Junio, como cierre del taller esta temporada.

Preparo un nuevo proyecto teatral para el Festival Russafa Escènica, en base a mi monólogo La madrastra de Cenicienta, en el que colaboro con el diseñador gráfico Txemacántropus y la actriz Claudia Verdecchia.

En Julio estaré en el Festival del Caribe, en Santiago de Cuba, con mi espectáculo Trilogía de Mujeres Medievales, unipersonal dirigido e interpretado por mí, en base a los tres textos que componen mi trilogía.

Todo ello, y mi dedicación a preparar el X Festival de DONESenART, está retrasando la escritura de mi nuevo texto, en estos momentos en proceso de construcción, sobre dos mujeres fundamentales en el siglo XV valenciano, y su relación con dos mujeres actuales. Estos juegos de espacio-tiempo me entusiasman. (Puedo decir que ya los personajes han empezado a hablarme, pero les he pedido esperar hasta dedicarles toda mi atención.)

Y un sueño, pendiente de llevarse a la práctica es la teatralización de un edificio emblemático de Valencia, a través de un recorrido con el público, en el que se viaja a través de un edificio, de una ciudad y de un país. El texto está prácticamente elaborado, en espera de su aprobación.

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