N.º 9 Mejor pensarlo dos veces. Ensayo
Teatro aplicado
Maxi de Diego
Autor teatral, investigador y profesor de instituto
Tomás MOTOS y Domingo FERRANDIS,
Teatro aplicado.
Teatro del oprimido, teatro playback, dramaterapia.
Barcelona, Octaedro, col. Recursos, 2015.
229 pp. 18,50 €. ISBN: 978-8-499216-53-9.
Resulta satisfactorio seguir aprendiendo, unos veinticinco años después, del profesor Tomás Motos. Entonces, de sus Prácticas de dramatización, escrito junto a Francisco Tejedo, en la editorial Humanitas; ahora junto al también profesor y actor, Domingo Ferrandis.
Motos, director del postgrado “Teatro en la educación”, y Ferrandis, profesor en el mismo, nos brindan la posibilidad de conocer una serie de campos en los que el teatro y las técnicas dramáticas abren sus puertas para alcanzar objetivos que van más allá de la clásica representación escénica.
Es cierto que estas aplicaciones, que siguen estando vivas, no son nuevas, pero la gran aportación que nos ofrece este libro es la didáctica clasificación y explicación de sus finalidades y estrategias. También la clarificación de su filosofía, que nos impulsa a la lectura, desde la creencia en la utopía hacen suyo el proverbio africano que reza: “Mucha gente pequeña en lugares pequeños, haciendo pequeñas cosas, puede cambiar el mundo”. Así:
(…) el teatro aplicado ha de ser una praxis que genere conocimiento crítico desde la práctica para orientarlo a la práctica, con la voluntad de contribuir al campo social a favor del respeto, la igualdad, el acceso a los bienes y a la solidaridad a través de la capacidad educativa de las artes.
Como decíamos, si en algo destaca la elaboración del libro que comentamos, es en su claridad expositiva. A través de su lectura, los autores esclarecen el concepto de teatro aplicado y sus diferentes manifestaciones. Después de presentarnos diversas conceptualizaciones y categorías a partir de varios autores y sus propias observaciones, proponen una clasificación en cuatro ámbitos: el cambio en la educación formal, el cambio social, el cambio personal y de los colectivos, entendido como curación, y el cambio corporativo y el de la formación dentro de las empresas. Y, a su vez, dentro de cada uno de estos ámbitos exponen una serie de manifestaciones con un rasgo en común: su liquidez, es decir, la conexión entre unas modalidades y otras dificultan el trazo de unas fronteras cerradas.
A partir del capítulo tercero del libro, Motos y Ferrandis se detienen en algunas de las modalidades del teatro aplicado: teatro del oprimido, teatro playback y dramaterapia, para cerrar con un epígrafe dedicado a la relación entre el teatro y la neurociencia.
En cuanto al teatro del oprimido, después de una breve semblanza de Augusto Boal, comentan el origen y las características de algunas de sus propuestas: teatro periodístico, teatro invisible, teatro imagen, teatro foro, teatro legislativo, el arco iris del deseo y la estética del oprimido. Desarrollan, a continuación, dos de ellas y profundizan en algunas de sus posibles aplicaciones:
- El teatro imagen, sus técnicas y su aplicación en contextos educacionales y de intervención sociocultural.
- El teatro legislativo, sus técnicas y cómo fue implementado en el contexto brasileño en los años 90 en los que Boal fue concejal del ayuntamiento de Río de Janeiro.
También con una intención pedagógica, Motos y Ferrandis, desde su profundo compromiso con el cambio educativo, ofrecen un modelo de utilización de las dinámicas del teatro del oprimido en la formación del profesorado. Describen el proceso desarrollado con un grupo de profesores y profesoras tomando como base el aprendizaje vivencial, y aportan un minucioso y rico análisis de los resultados para concluir en la “muy alta utilidad personal y profesional de la metodología y de los contenidos teóricos del teatro del oprimido que los participantes perciben”.
Para ilustrar la modalidad del teatro playback recurren a la explicación de una experiencia llevada a cabo por el grupo Teatro Playback Inestable, si bien, previamente, nos informan de en qué consiste y de su origen y, posteriormente, contextualizan algunas de sus aplicaciones en la educación, el cambio social, la empresa y la psicoterapia. Incluso aportan propuestas para la interpretación y el entrenamiento de los actores con ejercicios concretos.
El capítulo 5 del libro nos presenta la dramaterapia, es decir, “el uso intencional de aspectos del drama y del teatro en los procesos terapéuticos o estimuladores”. Tienen cabida en este apartado su origen, sus técnicas, sus destinatarios (interesante su aplicación en la gerontología para la que aportan una serie de ejercicios para la estimulación motriz, de la memoria, de las relaciones sociales, para la ruptura del aislamiento), desde la siguiente perspectiva:
El teatro es un medio lleno de magia que nos ayuda a conocer nuestras emociones y a descubrir el mundo; en definitiva, a expresarnos y comunicarnos mediante las técnicas teatrales para solucionar problemas.
Y citan al pintor Cristino de Vera como reflejo de la intencionalidad de este capítulo: “el arte es una defensa del miedo, de la oscuridad, de la muerte”.
Se cierra el libro que reseñamos con un comentario de las conexiones entre teatro y neurociencia: “Se habla del objetivo común que comparten la neurociencia, la psicología y el teatro para mejorar la calidad de vida individual y colectiva, ya que el teatro es el cerebro en movimiento”. Pero más allá de reflexiones teóricas, el capítulo aporta información de algunas investigaciones concretas en neurociencia que utilizan el teatro. Este, como simulador de conflictos, “permite ver la imagen distorsionada que el cerebro tiene del mundo, al mismo tiempo que muestra muchas formas de nuestro yo”.
Un libro interesante y necesario es aquel que abre puertas a la mejora profesional o personal, y, en este caso, después de la lectura parece factible poder llevarla a cabo. Los autores no solo demuestran un profundo conocimiento de los temas tratados; además, muestran una apreciable sensibilidad en su transmisión y un compromiso firme con la transformación social y personal a través del teatro en la confianza de que otro mundo mejor es posible.